El yen japonés colapsa frente al dólar al nivel más bajo en 34 años
Vincent Chung, gestor de cartera en T. Rowe Price, señaló que los funcionarios japoneses parecen más centrados en la volatilidad de la moneda que en niveles específicos como el alcanzado este lunes.
Por Gonzalo Andrés Castillo
Durante la jornada de este lunes, el yen japonés se debilitó y alcanzó los 160 por dólar, el nivel más alto desde abril de 1990. De esta forma, acumula una pérdida de valor del 36% desde el máximo relativo de principios de 2021.
El comportamiento bajista de la moneda asiática coincidió con la persistente fortaleza del dólar, ya que las previsiones de recortes de tasas por parte de la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed) mostraron que la flexibilización se pospuso.
El indicador de inflación preferido por el banco central resultó estar ligeramente por encima de las expectativas el viernes, lo que destaca los desafíos que enfrenta el país para hacerle frente al fenómeno monetario.
Por su parte, el yen llegó a cotizar por encima de los 150 por dólar luego de que el Banco de Japón puso fin a su régimen de tipos de interés negativos en marzo. Y este viernes, la institución mantuvo las tasas y elevó ligeramente sus pronósticos de inflación para el año fiscal 2024.
En este contexto, Vincent Chung, gestor de cartera en T. Rowe Price, señaló que los funcionarios japoneses parecen más centrados en la volatilidad de la moneda que en niveles específicos como el alcanzado este lunes.
"El ritmo actual de depreciación es menor que en 2022, por lo que la respuesta de intervención podría ser menos intensa", comentó el especialista, quien agregó que los precios de las opciones sugieren que los mercados predicen que la intervención podría producirse tras la reunión de mayo del Banco de Japón.
En una conferencia de prensa, el gobernador del Banco de Japón, Kazuo Ueda, indicó que la volatilidad del tipo de cambio sólo afectaría la política monetaria de haber un impacto "significativo" en la economía.
"Si los movimientos del yen tienen un efecto sobre la economía y los precios que es difícil de ignorar, podría ser una razón para ajustar la política", mencionó Ueda el viernes pasado.
